Superman: American Alien #1

Superman: American Alien es un cómic para toda la gente que despotrica contra Superman.

No porque el cómic haga algo distinto con el hombre de acero, intentando una reinvención del orto como lo que hacen en Superman: Earth One, sino porque precisamente engancha con lo que hace a Superman del papito de todos los superhéroes.

A grandes rasgos, Superman: American Alien es la historia de cómo el hombre de acero fue criado en el campo, por una pareja de huasos que hallaron su capsula espacial, y sobre cómo los valores y principios que le inculcaron, terminaron encaminando a un personaje que no es definido por ser el más poderoso de todos, sino por ser uno que inspira.

Max Landis, el guionista de películas como Chronicle o American Ultra, es el responsable de la historia de este cómic, que en su primer número nos presenta a un Clark Kent que aún no sabe cómo controlar sus habilidades y que, al mismo tiempo, carece del poder de ser como el resto.

American Alien en esa línea es la historia de cómo este niño crece para convertirse en el héroe más grande de todos y por qué no es un cabrón. Para eso se centra un niño de Kansas que solo quiere ser como cualquier otro, pero que tiene la particularidad de ser alguien especial y que debe aprender a vivir con ello.

La gran gracia de este primer número es que no presenta a Clark como un santo. Es alguien enojado, no está contento consigo mismo por ser especial y no puede disfrutar de cosas básicas, ya que en cualquier momento puede salir disparado hacia el cielo, ya que aún no controla su habilidad de volar.

Pero ahí están sus padres para ayudarlo. Aunque Clark tiene el poder de destruir cosas cuando se molesta, Jonathan Kent le dice las palabras que lo definirán: «no puedes romper las cosas cuando quieras hacerlo, ya que eso es algo que hace un cabrón».

Y American Alien se esfuerza en decirnos que este niño no será un idiota que no mide las consecuencias de sus actos obrando de manera egoísta y por eso mismo la dinámica entre padre e hijo es lo que hace brillar a este número.

A partir de ahí, American Alien logra enganchar con la esperanza, el optimismo, bajo la idea de que Clark Kent puede abrazar el don de sus habilidades, en vez de creer que son una maldición. Uniéndolo a toda la narrativa de la crianza, Max Landis conecta con lo que logran plasmar las mejores historias de Superman: que la raza humana puede ser mejor si decidimos hacerlo, que podemos avanzar rumbo al sol.

El otro punto fuerte es el arte del cómic, a cargo de Nick Dragotta (East of West) y los colores de Alex Guimaraes, que toman un tipo de arte más juvenil no solo para diseñar a los personajes, con los Kent ya no teniendo el arquetipo de adultos tipo abuelos, sino que también para plasmar la acción de cada viñeta para abrazar la inocencia, ya sea con el juego luminoso de los colores o el uso de las expresiones faciales.

Asimismo, hay un par de secuencias realmente icónicas, especialmente en lo que concierne a una que nos anticipa cierto futuro azul y de capa roja de Clark. Es el gran momento de esta introducción.

Más que ser solo «otra historia de los orígenes» sobre este personaje que conocemos al revés y al derecho, Superman: American Alien abraza lo mejor del hombre de acero para armar algo que se siente fresco y que sirve de excelente contrapunto para que los críticos del hombre de acero se acerquen a un personaje que denostan por prejuicios.

Más importante, tiene una característica ausente en la reciente versión cinematográfica y que siempre está presente en las mejores historias del azuloso: puro optimismo. Y eso es algo que siempre hace falta en este mundo que actualmente se está yendo a la mierda.

American Alien #1 es escrito por Max Landis, con arte a cargo de Nick Dragotta y colores de Alex Guimaraes. Lo pueden leer ahora ya en Comixology o comprarlo a las tiendas de Shazam Comics en Santiago.